Rafting

Los comienzos del rafting en el río más largo de Eslovaquia se remontan al siglo XI. Váh era la única ruta conveniente y segura durante el proceso de ocupación de Eslovaquia.Para los practicantes del rafting, el valle de Strečno representaba una experiencia innovadora e inusual. El valle, con sus numerosos meandros y obstáculos reales o ficticios, sus dos castillos y la naturaleza virgen de Malá Fatra, se convirtió en un lugar deseado, pero al mismo tiempo respetado.

Las embarcaciones solían salir de Liptov y una vez pasadas las rocas Margita y Besná, la navegación continuaba suavemente hasta el Danubio y luego hasta el Mar Negro. En el pasado, las embarcaciones de madera solían ser el medio de transporte más importante, tanto para el transporte de personas como para el de mercancías, pero a finales del siglo XIX y principios del XX, comenzó lentamente a ser sustituido por el transporte ferroviario, más barato. Por ello, los años 30 son considerados como una época de decadencia para el rafting en el Váh.

La naturaleza ha conservado su belleza y su magia en este lugar, por ello, desde 1999 Prvá pltnícka a raftingová spoločnosť ha optado por desarrollar el potencial del paisaje para presentarlo como una atracción turística. La vuelta al transporte tradicional en la zona, permite a los visitantes el familiarizarse con las innumerables curiosidades históricas, naturales y técnicas concentradas a lo largo de los 7 km que ocupa el citado trecho fluvial.

Los guías, vestidos con los trajes tradicionales de la región, les ofrecerán un comentario profesional. Con el fin de hacer esta oferta más atrayente y la estancia en esta parte de Eslovaquia aún más agradable, Prvá pltnícka a raftingová spoločnosť ofrece además un interesante programa complementario.